Todos deberíamos ser feministas. Chimamanda Ngozi Adichie

Publicado por Vorágine en

Nunca es demasiado feminismo

Este brevísimo texto es resultado de una conferencia que la autora Chimamanda Ngozi Adichie realizó en el año 2012 para TEDxEuston, en África. Fue entonces que tras dicha charla salió este poderoso libro que los hará reflexionar sobre un tema del que no nos cansaremos de hablar: el feminismo y su impacto en la vida de las personas.

¿Por qué tanta insistencia con el feminismo?

Porque en el mundo entero el patriarcado y el machismo han impuesto una serie de acciones y modos de vida donde las mujeres no pueden vivir en libertad ni en igualdad, y como no es justo, es necesario insistir en el tema hasta lograr construir un mundo mejor para todas, todos y todes.

El tema central de “Todos deberíamos ser feministas” versa sobre las diferencias entre mujeres y hombres dentro de una sociedad, distinciones culturales y sociales que definen los roles de género y por ende la manera de relacionarse con otros seres humanos y con el entorno.

Los roles de género imponen estereotipos y formas de ser que impiden a las personas relacionarse libremente entre sí. Son normas restrictivas en las que no cabe ninguna otra perspectiva y que desafortunadamente perjudica a las mujeres mientras que favorece a los hombres.

La inequidad de género afecta todos los ámbitos de la vida de las personas, sin embargo, la autora señala que es un tema difícil de hablar porque causa incomodidad y molestia entre hombres y mujeres que se resisten al cambio y a analizar de manera crítica su propia realidad.

Es mucho más sencillo negar los problemas que buscar una solución y para los varones (incluso también para muchas mujeres) es todavía muy difícil aceptar que los hombres gozan de privilegios que las mujeres no tenemos, como por ejemplo: caminar libremente por la calle sin temer ser atacados sexualmente. Esto para muchos varones parece una exageración pero realmente no se han detenido a pensar que ellos no tienen que sopesar si una prenda determinada podría poner en peligro su integridad, su seguridad o hasta su vida. Nosotras sí, porque además, en la cultura machista, la mujer será culpable de las acciones de los violentadores.

La cultura no hace a la gente. La gente hace la cultura.

El yugo del machismo

Es tiempo de reconocer que la violencia contra la mujer es una problemática que no se ha superado, por ello, Chimamanda Ngozi Adichie insiste en que ha llegado el momento de cambiar nuestra cultura y construir una donde los seres humanos se respeten sin distinción alguna.

Otro punto sobre el que reflexiona la autora es acerca del concepto de “virginidad”. Mientras que a los varones se les motiva a tener una vida sexual activa a temprana edad, a las mujeres se les castiga y se les juzga de manera totalmente distinta si demuestran algún interés en explorar su sexualidad. Y tal como menciona Chimamanda Ngozi Adichie, es una contradicción, pues para que se pierda la “virginidad” es necesario que participen dos personas; en parejas heterosexuales esto involucra a mujeres y a hombres por igual, sin embargo, a ellos se les festejará lo que a nosotras se nos reprochará.

Reflexión final

Si queremos un mundo más justo es momento de trabajar juntos, mujeres y hombres, por el bien de la humanidad.

No teman a perder los privilegios que este sistema patriarcal les ha dado, pues podemos construir una sociedad benéfica para todas las personas y seres vivos del planeta y no solo para unos cuantos.

El feminismo no busca la destrucción de nadie, todo lo contrario, su finalidad es impulsar una comunidad justa y favorable para toda la humanidad.

Por Patricia Munguía Correa, ¡síguela en twitter o en Instagram!

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