Bojack Horseman. Esa caricatura del caballo

Publicado por Vorágine en

Bojack Horseman es, simplemente, la mejor caricatura para adultos que se ha hecho. Sí, incluso mejor que Los Simpson, porque a diferencia de la familia amarilla, Bojack no excedió su bienvenida y concluyó en el momento justo, respetando el emocional trayecto que todos los fanáticos vivimos al lado de nuestro atormentado caballo favorito. Y si eres una de las personas que no conoce esta serie de Netflix, en estas líneas te platicaré porque te harías un enorme favor viéndola.

Esta serie puede parecer un poco extraña al principio, pero en unos cuantos capítulos te atrapa con ese humor irreverente que caracteriza a las caricaturas gringas para adultos, mezclado con profundas observaciones y deconstrucciones sobre temas como la vida y la muerte, el amor, la depresión, las adicciones, la ansiedad y, en gran medida, la fama, esa meta que muchos perseguimos pero que entraña múltiples peligros. Y estos temas siempre son tratados con honestidad y sensibilidad por lo que el espectador se puede sentir muy identificado con las luchas de los personajes contra sus demonios personales, y todo esto sin sacrificar el sentido del humor, pues esta serie logra algo que es muy difícil, tener un balance perfecto entre la comedia y el drama.

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Muchos han encontrado paralelismos entre Bojack Horseman y Mad Men, la serie de exploración humana por excelencia.

Además, la crítica social que hace la serie es siempre directa y valiente, denunciando sin tapujos muchos males que se han normalizado en la sociedad como el abuso sexual, la hipocresía de los medios, la misoginia y la violencia de género, la violencia intrafamiliar y el racismo. Otro de los mejores puntos de la serie es su continuidad, pues todos los sucesos tienen consecuencias y en un capítulo cualquiera puede cambiar permanentemente la vida de los personajes, a diferencia de otras series donde parecen estar atrapados en una especie de limbo estático.

Holi!

Sin duda, la estrella del show (en todo sentido) es el caballo protagonista de la serie, Bojack Horseman, un actor de Hollywoo venido a menos que desea ser amado y admirado por todos, mientras que al mismo tiempo lucha con sus defectos y sus tendencias autodestructivas que le hacen una y otra vez lastimar a quienes lo rodean, aunque en el fondo es una persona de buen corazón.

Decir más sobre esta serie es arriesgarse a espoilearla, pero vale la pena mencionar que varios de sus episodios, como Escape From L.A., That’s Too Much Man! y Free Churro contienen algunos de los momentos más memorables en la historia de la televisión.

Es cierto que a veces resulta molesto cuando muchas personas hablan y se emocionan con algo que tú no conoces, pero no permitas que eso te ahuyente de ver Bojack Horseman, pues te estarías perdiendo de una experiencia increíble.

Y ahora el querido lector perdonará a este fan por ser tan fan, pero esta es una cuestión de dar honor a quien honor merece y Bojack Horseman es una serie de diez absoluto. ¡A verla de nuevo!

Por Javier LR, personaje de ficción. 

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